Por. Nahomi Martínez
De la codificación a la creación, un camino complejo y minucioso en el que la artista visual argentina, Claudia Guerrini, decide andar con determinación y toda la delicadeza que demanda, además de la conceptualización de su obra, el uso de papel en su propuesta artística.
La proyección de su trabajo es realizada a partir de códigos visuales – no lingüísticos-, acordes al tema elegido por ella, convertido entonces, en el eje del argumento, “brindando cohesión y coherencia a la organización estética, siendo posible su creación en un espacio de reflexión”, nos cuenta.
En el contexto actual en el que la contemporaneidad acerca un sinfín de propuestas conceptuales complejas y llenas de significados, Guerrini plantea abiertamente su interés en proporcionar al destinatario la libre interpretación de su obra, basándose en una nueva lectura, “convirtiéndola en una obra infinita”.
Es así como la propuesta de esta artista, se transforma, al menos de manera simbólica, en una especie de bosque sin límites, que debe y merece ser recorrido, descubierto, interpretado y reinventado en base a la magia de su creadora, y la capacidad de cada uno de acercarse a ella, convirtiendo el proceso reflexivo un recurso indispensable para la interacción.
Entre los materiales que emplea, los papeles de pulpa teñida constituidos por el 50% de algodón en sus diferentes colores, tienen predominancia, caracterizado principalmente, por presentar en sus caras diferentes texturas y granos, siendo un papel de gran ductilidad que facilita su cortado y plegado en la elaboración de sus proyectos estéticos.
Desde Expertos en Arte FD Magazine, conversamos con la artista sobre su trabajo, intentando ahondar un poco en su proceso creativo y de producción.
EeA: ¿Cómo inicia tu interés en el uso del papel para el desarrollo de tu obra?
CG: El uso del papel en mi obra comienza cuando conocí al Artista, profesor y maestro Carlos Alfredo Ara Monti, quien me instruyó en las cualidades y beneficios del papel.
Cuando él trabajaba con el acrílico, paralelamente, comenzó a desarrollar la técnica con el papel Canson libre de ácidos, allí comenzó a su proceso de enseñarla. Estos papeles que permiten tener mucha resistencia tanto mecánica como a la luz, me permiten su utilización en la realización de diferentes técnicas de las producciones estéticas como el calado, el perforado, el plegado, el pegado y pop up. De esta forma las obras reciben el reconocimiento por su calidad estética.
CG: Realizo la obra abordando un proceso de investigación, cuyo tema se relaciona con la literatura de la obra de Silvina Ocampo, Lewis Carroll, por ejemplo, llevándolo a reflexiones previas a la producción estética, con el planteamiento de Deleuze sobre el pensamiento rizomático, logrando de esta manera, la posibilidad de desgarrar la obra para poder descifrar lo que la ella me quiere decir, en un proceso de desconstrucción y reconstrucción.
Es un arte no referencial. El referente es la literatura o la historia que se crea. De esta manera, realizo la producción estética.
EeA: ¿Qué elemento considerás determinante para la configuración de esos códigos visuales?
CG:Toda mi obra está realizada en papel libre de ácido en todos sus colores. En la producción estética, el color es un signo visual, que pertenece a los códigos visuales al igual que la forma, es decir, hablo de forma-color considerándolas como unidades semánticas funtivas.
El uso estético del código permite un nuevo tipo de visión del mundo, estimulando el trabajo interpretativo que realizará el destinatario.
EeA: En este sentido en el que planteás toda tu producción artística ¿Qué significa el arte para vos?
CG: El arte es serio, la producción estética tiene que estar basada en un estudio, en un análisis, una reflexión profunda para que el espectador ante la obra, se demore, la contemple, que pueda descubrir que es lo que le quiere decir.
Contacto: clauguerrini@hotmail.com
Buenos Aires, Argentina